Esto es lo que es una experiencia Erasmus…

Resulta que en la residencia donde estoy tienes que compartir la cocina con 12 individuos, algunos de ellos más próximos genéticamente al cerdo que a otra cosa (bueno, quizá a una cucharacha).

Pues hay varios de ellos (me he quedado con sus caras y ya estoy preparando un muñeco vudu) que cuando se cocinan algo (cocinar en este caso sería un eufemismo de “puerquear”), dejan todos los utensilios que han utilizado es su poción mágica durante dias (repito: DIAS) arrejuntados en el fregadero. Y claro, los demas tenemos que sufrir semejante tortura ademas de sufrir la escased de los utensilios y, el olor…

Además, es que entran, lo ven, y se quedan tan panchos… Vamos, yo les daba un par de hostias a cada uno…

No me extraña que luego haya legionela, meningitis, paperas y la madre del copón de bullas pululando por este campus…

En tres palabras: hijos de puta.